Hoy día se mantiene como un centro comercial fantasma, lo que a primeros de los años 80 se ideo como uno de los primeros y mas modernos centros comerciales de Madrid. El poder pasearse por sus solitarios pasillos y recorrer sus tiendas cerradas da una sensación de soledad, de que la civilización se ha extinguido de la noche a la mañana.
Entrada principal del mercado de Puerta Toledo |
El mercado de Puerta de Toledo fue en un principio el mercado central de Pescados y Mariscos de Madrid de 1934 a 1982. Este fue construido en el mismo lugar que ocupaba el antiguo matadero municipal, fue construido en 1931 según el proyecto del arquitecto don Francisco Javier Ferrero, el mercado central de pescados y mariscos de Madrid que fue considerado el mayor puerto de España debido al volumen de pescado comercializado diariamente. En 1982 y tras casi 50 años de existencia, se procedio al abandono de sus instalaciones para su nueva ubicación en Mercamadrid.
Mercado central de pescados y mariscos de Madrid 1969 |
Fachada a Ronda de Toledo |
Fachada de la calle ronda de Toledo esquina con plaza del campillo del nuevo mundo. (1969) |
Fachada actual calle ronda de Toledo esquina con plaza del campillo del nuevo mundo |
Descarga de los camiones en el mercado central de pescados y mariscos de madrid. |
Aquí se puede ver la sección general por la bisectriz y la entrada de paso
En algunos locales estaban de obras de acondicionamiento
Recorrer sus pasillos sin ver a una sola persona y el hecho de estar tan "habitado" hace pensar que nos encontremos en medio de una película de esas en que la humanidad se ha extinguido. Las cafeterías están vacías, sus sillas y mesas montadas pero nadie las atiende ni nadie ya come en ellas, incluso las maquinas dispensadoras ya no dispensan comida ni bebidas , poco o nada queda en el centro comercial fantasma excepto los escaparates de la tiendas cerradas al publico.
Nadie tiene ya que hacer cola en los baños, bien sea un sábado al medio día o un laborable por la tarde. Unas escaleras mecánicas que no funcionan al igual que los ascensores, nos conducen a la salida después de haber visitado este enclave casi desconocido en el corazón de Madrid.
Un nacimiento todavía montado en uno de los escaparates de las tiendas nos recuerda aquellas ultimas navidades que vivió el centro y que le costara revivir. y una ultima foto mientras sacábamos unas instantáneas (con el móvil ) por que el edificio esta vigilado y no te dejan tirar fotos.....